Tengo que poder...
Tengo que poder con esto, porque si no, podrá conmigo. Tengo que ser fuerte por mí, porque si no, nadie me levantará cuando me haya caído. Tengo que secar mis lágrimas y parar mi mente, porque poco a poco estoy dejando que esta tristeza se cronifique. Tengo que pensar en mí, porque nadie más lo hace. ¿De qué sirve preocuparse por quienes no lo hacen por mí? ¿Tiene sentido caer cada noche extenuada de dolor por quienes no tienen un minuto que dedicarme? ¿ Vale la pena trabajar tanto, para quienes no valoran lo que hago?